En el marketing hay muchas formas de hacer las cosas, y todas ellas tienen éxito si se hacen bien. Una de ellas lleva ya algún tiempo entre nosotros y ha demostrado ser muy efectiva cuando se lleva a cabo de la manera tan magistral como lo hace, por ejemplo, Ikea. Estamos hablando del storytelling, un término marketero del que seguro que has escuchado hablar más de una vez. ¿Qué es? Pues ni más ni menos que la maestría de saber contar historias. Sigue leyendo y te contaremos más sobre él y qué debes hacer para dominarlo.
El marketing ya no se trata de las cosas que vendes, sino de las historias que cuentas.
Seth Godin
La importancia del storytelling
En la actualidad, el marketing ha comprendido que para vender hace falta algo más que crear buenos eslóganes (que es muy necesario). Los consumidores quieren algo más. Y la competencia, gracias a la posibilidad de vender y comprar desde cualquier lugar del mundo es más numerosa que nunca. Ya no importa que tengas un pequeño negocio en una pequeña ciudad, tienes un montón de competidores a un clic de distancia. Por eso, es imprescindible diferenciarse, ofrecer un valor añadido al usuario.
Con ese objetivo en mente, el content marketing ha ido perfeccionándose hasta lograr auténticas joyas que poco parecen tener con la publicidad. Y ahí reside su éxito. Al crear historias se conecta con el consumidor, llegando al centro de sus emociones. ¿Qué quiere decir esto? Que se deja de ser una marca más para convertirse en la opción que elegirán por encima del resto, ya sea porque se identifican con ella o con sus valores, o porque les transmite buen rollo, o porque les recuerda a su infancia.
La ciencia ha demostrado que los seres humanos tenemos una mayor facilidad para entender y almacenar datos cuando nos los transmiten en forma de historias. Es decir, es nuestra parte más primaria, las historias son el vehículo más elemental y natural para nosotros. Por esta razón, el storytelling es tan poderoso. No solo permite transmitir de una forma efectiva un mensaje o qué es nuestra marca, sino que nos permite conectar con el usuario. No se trata de anuncios, se trata de trasladar conceptos abstractos y complejos de forma sencilla, de ir más allá.
El storytelling en las campañas de publicidad
Quizá uno de los primeros espacios en los que se coló la técnica del storytelling (y encajaba como un guante) fue en las campañas de publicidad. La audiencia está saturada, recibe anuncios desde todos los rincones durante todo el día, por lo que es muy difícil captar su atención. Si en lugar de repetirle los mismos mensajes que, básicamente, le dicen «mi producto es el mejor«, «somos diferentes, cómpranos a nosotros» y que no le aportan nada, creamos una historia para el usuario, entonces lograremos que se detenga durante 3 minutos y preste atención.
En realidad no son necesarios unos gastos mayores a la hora de realizar las campañas, sino una buena dosis de creatividad. Porque no todo el mundo tiene la capacidad de escribir historias que emocionen o que conecten con quien las escucha, pero sí que se puede trabajar para ir desarrollando ideas cada vez más conmovedoras y profundas. Vamos a tomar como ejemplo de una historia bien contada uno de los anuncios de Ikea, expertos en el storytelling:
Otro de los ejemplos patrios que podríamos mencionar es Campofrío, con sus spots anuales que conectan con nuestras parte más emocional y nos hacen reconocernos en esos personajes y situaciones tan arraigadas en el imaginario colectivo español. No solo nos hacen reír, incluso se nos olvida que se trata de una marca vendiéndonos un producto:
Por último, una campaña de publicidad que está muy reciente en el tiempo: la de la Lotería de Navidad. ¿Acaso se necesita una campaña para que el público no se olvide de comprar su décimo? No, pero se sigue trabajando año tras año para ofrecer un mensaje que conecte de nuevo con la audiencia, por mucho que esta cambie. Después de estos ejemplos magistrales, pasemos a ver cómo crear un storytelling de éxito.
Claves para un storytelling de éxito
Lo primero que hay que preguntarse a la hora de crear una historia es: ¿a quién nos dirigimos? Nuestra audiencia será quien nos marque el tono y el argumento de la historia, y sus peculiaridades las que nos permitan conectar con ella. Tu buyer persona es el que servirá como base para identificar a quién te diriges, lo que te ayudará a detectar qué le gusta, qué le emociona y qué necesita.
En segundo lugar debemos plantearnos lo siguiente: ¿qué queremos transmitir? No lograrás conectar con nadie si tu mensaje no tiene fondo ni sentido. No se trata de emocionar por emocionar, tenemos que construir una historia con sentido que capte la atención del público. Para apoyar este punto, elige personajes atractivos que doten de fuerza al argumento y que le den profundidad.
Ahora que tenemos claros esos dos puntos, ¿qué queremos conseguir? Es posible que a la hora de crear una historia lo que queramos sea aumentar el brand awareness, es decir, que la gente conozca nuestra marca. Pero otro de nuestros objetivos puede ser promover una acción o educar sobre algún tema.
Por último, ¿qué estructura va a tener? Un storytelling de éxito debe estar planificado y planteado de antemano, de forma que tenga un planteamiento, un nudo y un desenlace coherentes.
A la hora de crear tu historia, ten siempre en mente los valores de tu marca, pues han de quedar representados en ella. Con todo lo anterior definido, solo necesitas una idea original para crear un storytelling potente. Recuerda que no solo puede ser una historia escrita, hazla visualmente atractiva a través de un vídeo o utiliza el formato podcast para trasladarla a tu audiencia como un audio (ahora más que nunca los anuncios en Spotify son un must), ¡no te pongas límites!
Comenta